Nueva edición revisada, actualizada y prologada por el profesor Juan Carlos Infante Gómez, experto en la figura de Manuel Gª Morente. Una de las obras más importantes del filósofo jienense en la que relata el que fuera su proceso de conversión durante su exilio en París.
Con este pensamiento me pareció haber llegado por fin a la solución más clara y neta del problema de la vida en mí y fuera de mí. La vida y los hechos de la vida, que Dios providente hace y produce, Dios también nos los da y atribuye. Pero nosotros los aceptamos, los recibimos libremente; y por eso son nuestros tanto como suyos. Son suyos, porque Él es su Autor, creador, distribuidor y provisor. Son nuestros, porque nosotros libremente los aceptamos de su mano. Ahí está el toque, ahí está la esencia de la Humanidad: aceptar a la vez sumisa y libremente. El acto más propio y verdaderamente humano es la aceptación libre de la voluntad de Dios. Manuel Gª Morente
Manuel García Morente
Obtuvo su licenciatura en Filosofía en la Facultad de Letras de la Sorbona. Posteriormente su pensamiento quedaría influido por la Escuela neokantiana de Marburgo. Fue Catedrático de Ética en la Universidad Central de Madrid desde poco antes de cumplir los veintiséis años, lo que le convirtió en el catedrático más joven de España. Ocupó mediante elección unánime el decanato de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Madrid, desde finales de 1931 hasta el estallido de la Guerra Civil española, adquiriendo durante esos años dicha facultad prestigio internacional.
Traductor infatigable y profesor de admirable claridad expositiva, sus libros y ensayos filosóficos convierten a Morente en uno de los más destacados filósofos españoles del siglo XX, hallando cauce su pensamiento en el espíritu de la fenomenología y en la filosofía de la razón vital de Ortega y Gasset. Enviudó a los diez años de matrimonio, en 1923, cuando sus dos hijas tenían muy corta edad. Su familia era profundamente católica, pero se mantuvo desde su juventud alejado de convicciones y creencias religiosas. En El Hecho extraordinario relata el itinerario de su conversión, ocurrida en 1937 durante su exilio en París. Acabó su vida como sacerdote en Madrid. Nunca renunció al magisterio de Ortega, cuyas concepciones no tuvo tiempo de integrar, por su prematura muerte, con el pensamiento de Tomás de Aquino y la verdad cristiana católica.
Juan Carlos Infante Gómez
Obtuvo su licenciatura en Filosofía en la Facultad de Letras de la Sorbona. Posteriormente su pensamiento quedaría influido por la Escuela neokantiana de Marburgo. Fue Catedrático de Ética en la Universidad Central de Madrid desde poco antes de cumplir los veintiséis años, lo que le convirtió en el catedrático más joven de España. Ocupó mediante elección unánime el decanato de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Madrid, desde finales de 1931 hasta el estallido de la Guerra Civil española, adquiriendo durante esos años dicha facultad prestigio internacional.
Traductor infatigable y profesor de admirable claridad expositiva, sus libros y ensayos filosóficos convierten a Morente en uno de los más destacados filósofos españoles del siglo XX, hallando cauce su pensamiento en el espíritu de la fenomenología y en la filosofía de la razón vital de Ortega y Gasset. Enviudó a los diez años de matrimonio, en 1923, cuando sus dos hijas tenían muy corta edad. Su familia era profundamente católica, pero se mantuvo desde su juventud alejado de convicciones y creencias religiosas. En El Hecho extraordinario relata el itinerario de su conversión, ocurrida en 1937 durante su exilio en París. Acabó su vida como sacerdote en Madrid. Nunca renunció al magisterio de Ortega, cuyas concepciones no tuvo tiempo de integrar, por su prematura muerte, con el pensamiento de Tomás de Aquino y la verdad cristiana católica.
